Un devastador accidente se produjo la noche del miércoles 16 de octubre en el recorrido que une Los Ángeles con Laja, dejando un saldo fatal de dos víctimas. El siniestro ocurrió a las 21:30 horas, cuando un bus de la empresa “Laja”, que transportaba a 21 pasajeros, se volcó a alta velocidad en la ruta Q-90, impactando contra elementos de la vía y dañando el tendido eléctrico.
Entre las víctimas fatales se encuentran Andrea Araya Orellana, de 40 años, y Ladimir Espinoza Contreras, de 33, cuyas identidades fueron confirmadas por la delegada presidencial de la Provincia de Biobío, Paulina Purrán. Araya era una madre que estudiaba en Los Ángeles y viajaba regularmente para completar sus estudios, mientras que Espinoza, trabajador del norte del país, había llegado recientemente al sur para visitar a su familia.
El alcalde de Laja, Roberto Quintana, expresó su profundo pesar, resaltando que ambas personas eran conocidas en la comunidad. En sus palabras, destacó el esfuerzo de Araya, quien era madre de pequeños y luchaba por salir adelante mientras estudiaba, así como la dedicación de Espinoza, quien estaba de paso antes de retomar su trabajo en el norte.
El teniente José Ojeda, de la Sección de Investigación de Accidentes en el Tránsito (SIAT) de Carabineros, informó que el conductor del bus, de 49 años, habría perdido el control del vehículo por razones que aún se investigan. Tras el impacto, el chofer fue detenido y permanece en el Hospital de Los Ángeles, fuera de riesgo vital. Se espera que se le realicen exámenes para determinar si manejaba bajo la influencia de alcohol o drogas al momento del accidente.
La comunidad de Laja y Los Ángeles se encuentra conmocionada por este trágico suceso, que ha dejado un vacío irreparable en las familias afectadas.
