La inseguridad sigue azotando a las calles de Chile, esta vez con un sangriento incidente en la comuna de Puente Alto, en el sector de Bajos de Mena. Lo que debía ser la previa de un velorio se transformó en una balacera con más de 150 disparos, cobrando la vida de un joven de 17 años y dejando a dos menores, de 11 y 13 años, gravemente heridos. Estos últimos, hermanos del fallecido, fueron también trasladados al Hospital Sótero del Río, donde, lamentablemente, el adolescente no logró sobrevivir a la gravedad de sus heridas.
El velorio que se preparaba era para un hombre de 44 años, asesinado en circunstancias que aún se investigan. El ataque tuvo lugar en la calle Reloj de Sol, cuando cuatro individuos llegaron al lugar y dispararon sin contemplación contra los presentes. Según las primeras investigaciones de la Brigada de Homicidios de la PDI, el hecho estaría vinculado al tráfico de drogas, lo que intensifica aún más el nivel de violencia que acecha a este sector.
El subcomisario Diego Novoa explicó que, en medio de los preparativos del velorio, los asistentes fueron sorprendidos por los atacantes, desatando el caos. A la llegada de las fuerzas policiales, se encontraron con un escenario dantesco: rastros de al menos 150 disparos. A pesar de los esfuerzos, hasta ahora no hay detenidos y la investigación se mantiene en curso.
Reflexión política: la violencia como espejo de nuestra realidad
Este tipo de episodios no son aislados, sino reflejo de una problemática más profunda. En Puente Alto, como en muchas otras comunas del país, la violencia armada parece haberse normalizado, mientras que los ciudadanos quedan atrapados entre la desidia de un Estado incapaz de garantizar su seguridad y la corrupción política que sigue extendiendo sus raíces.
Es inquietante observar cómo, en medio de la creciente inseguridad, los ciudadanos se ven seducidos por candidatos que invierten sumas exorbitantes en campañas políticas, pero no ofrecen soluciones reales para combatir la delincuencia y el narcotráfico. ¿De dónde proviene ese dinero? ¿Qué compromisos se están forjando en las sombras? Mientras los rostros de las vallas publicitarias multiplican sus promesas vacías, la violencia sigue creciendo.
En contraste, existen figuras políticas que, aunque no derrochan en marketing, mantienen un compromiso genuino con la ciudadanía, pero lamentablemente, su mensaje no logra calar hondo en una población que prefiere la superficialidad del eslogan. Este ciclo de decepción solo perpetúa la corrupción y la desconfianza.
El llamado a una ciudadanía crítica y consciente
¿Cómo pretendemos erradicar la corrupción y la delincuencia si seguimos eligiendo representantes que no tienen verdadero interés en resolver estos problemas? Es hora de que la sociedad despierte. No podemos vender nuestro voto por una promesa fácil ni por un beneficio momentáneo. Necesitamos líderes que trabajen con honestidad y responsabilidad, porque solo así será posible enfrentar el narcotráfico y la inseguridad que asolan nuestras comunas.
Lo ocurrido en Bajos de Mena no solo es una tragedia más, es una advertencia de lo que sucede cuando permitimos que el desgobierno y la violencia controlen nuestras vidas.













